viernes, 10 de abril de 2009

- Lo mismo de siempre N 2



Interés General | Ocurrio en Ensenada
Feroz ataque de un perro a un niño

El chiquito tiene 6 años. Fue mordido en el rostro por un mestizo grande, “tipo ovejero alemán”, al que alimentan los vecinos de Liniers y Haramboure. Intentó acariciarlo y terminó en el Hospital de Niños


El chiquito tiene 6 años. Fue mordido en el rostro por un mestizo grande, “tipo ovejero alemán”, al que alimentan los vecinos de Liniers y Haramboure. Intentó acariciarlo y terminó en el Hospital de Niños


Esta vez no se trató de un rottweiler, sino de un mestizo. Pero el ataque fue violento y la víctima -un chiquito de apenas 6 años- tuvo que ser trasladado a un centro asistencial de la región, en el que recibió las curaciones del caso.
Aunque recién se conoció ayer, el incidente ocurrió el lunes último cuando el niño -cuya identidad se mantiene en reserva- se encontraba con sus mayores en una vivienda ubicada en Liniers y Haramboure, de Ensenada.
La familia había concurrido a ese lugar para celebrar el cumpleaños de la dueña de casa, pero entre las 20 y las 21 el festejo se empañó: el nene salió hacia el auto, supuestamente en busca de un teléfono celular, y en su camino se cruzó con un perro que estaba en la vereda.
Sus familiares contaron a Hoy que cuando se acercó para acariciarlo el animal
-“bastante grande, tipo ovejero alemán”- lo mordió en la cara, provocándole lesiones sangrantes.
Con la urgencia del caso lo llevaron al hospital Horacio Cestino de aquella ciudad y luego lo trasladaron al hospital de niños Sor María Ludovica de La Plata, donde lo curaron de sus heridas y le aplicaron inyecciones. “Afortunadamente, a las pocas horas ya estaba en su casa”, dijo Elsa, una de las tías.
El perro es un animal callejero al que alimentan los vecinos de ese barrio que está ubicado cerca del Club Náutico Ensenada, que se conoce como Villa Tranquila.
Lejos de constituir un episodio aislado, el caso se suma a otros que ocurrieron durante los últimos meses en nuestra región. De hecho, hacia fines de enero último el consultorio antirrábico ubicado en 514 entre 11 y 12 de la localidad platense de Ringuelet, informó que atendía entre 25 y 40 consultas diarias por mordeduras de animales, en su gran mayoría perros.
Lejos de ser patrimonio exclusivo de esta región, el problema se encuentra extendido. De hecho, el mismo lunes,
un niño de 3 años fue atacado por el rottweiler de la familia, en una vivienda de Quilmes. El animal, que luego fue sacrificado, lo mordió en uno de sus brazos y lo arrastro hasta al fondo, provocándole serias heridas.
En nuestra región, la presencia de perros en las calles evidencia la inacción de los gobiernos municipales, que deberían construir refugios e iniciar campañas de castración, como tantas veces lo han reclamado las entidades protectoras de animales. Los perros callejeros también son potencialmente peligrosos para el tránsito. Sin ir más lejos, a mediados de febrero último, un motociclista de 30 años murió en Berisso, tras chocar a uno de ellos y ser arrollado por una camioneta.
Refugios y normas sobre tenencia responsable de mascotas, eso es lo que piden las protectoras para solucionar estos problemas.
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